Otro autoanálisis más...

Me conformaba con tan poquito...

Aun me da rabia y vergüenza pensar en lo enamorada que pude haber estado; en que cada detalle estúpido me parecía buena señal, aunque realmente fuese insignificante; en lo mucho que cedí. Me da rabia recordar cada momento en que estaba con mis amigas y ellas blanqueaban los ojos cuando les contaba de lo mío... de aburridas, de hartas... me da rabia recordar esa rabia, que me daba cuando prácticamente me decían senil. "Pobre nerd, pobre inocente. Despegate de la puta computadora, deja de ir a la iglesia, que te están lavando el cerebro".

Me da rabia asumir que tuvieron razón.

En algunos muchas instancias me detuve a alucinar en mi, dejando atrás todo eso. a los 11, a los 13, a los 15, a los 18... ¿Qué será de mi en un año, en dos? ¿Qué será cuando salga del liceo? ¿Que será cuándo salga de casa? ¿Qué será en algunos años más, cuando nos veamos y nada nos motive a hablar?

No pasó de golpe. De eso estoy segura. Fue un rasgo, una dimensión y luego las demás... una a una, hasta que todo un esquema, toda una personalidad se vio configurada. Supongo que lo desee tanto que se concedió.

En su momento pensé que se sentiría bien, ya sabes, tener un genio algo dominante, tener voz, estar ocupada de cosas serias, estar en un podio más alto. Pero no se siente bien. Más aún, no se siente bien enfrentarte a nuevas personas, y ver en ellas tu propio reflejo, el reflejo blanco de antes. No se siente bien comenzar a darte cuenta que esta nueva faceta te ha convertido en lo que te hirió atrás, y que puedes estar dañando a alguien más.

Me incomodan las personas demasiado permisiva conmigo. Quienes no me frenan cuando soy tosca. Creo que es cariño, eso que me incomoda. Por mi parte evitaré ser pesada y bajaré los brazos del rostro, me quitaré el escudo y toda mi armazón. Pero no quiero que me traten tan permisivamente. Si me llego a equivocar, si llego a decir estupideces, si llego a hacer daño, quiero que me despierten, que me llamen la atención.

Necesitamos un equilibrio. No podemos ser tan fríos, y por ahora no podemos ser tan buenos, con nosotros mismos.