jueves, 18 de abril de 2013

Cuando era chica, recuerdo que mi papá me llamó, y me dijo que por qué no iba y le decía algo a mi hermano, que llevaba un par de días bastante amargado. Según lo que recuerdo, fue por una chica, amiga suya. Creo que ella no quiso aceptar una propuesta suya, o algo así. Me parece mucho que nunca llegué a acercarme a él. Mi papá tiene que haber creído que si yo, una cabrita de no mas de 5 iba a darle ánimo "sin entender realemte por lo que pasaba", el le tomaría gracia, se reíría. Como esa vez que fui y le dije que dejara de fumar, porque era malo y daba cancer. Para esas huevadas me tenía mi viejo. A mi mamá no le hacía mucha gracia, al igual que cuando me sacaba a cantar el Himno Nacional a grito pelado en el pasaje.

Creo que fue en el verano, cuando andaba de visita en la casa de mi vecina, cuando la vi a ella. Años, sin verla. Seguía viendose de 20. Aunque sus dentadura no fuese del todo perfecta. Le dijeron que yo era hermana de él. Ella se habrá dado cuenta de antemano. Nuestro parecido sigue siendo el mismo. O más. Pensará que soy igual a él cuando tenía mi edad. Yo me acordé de todo. Me acordé que le dijo que no, que empezó a andar con otro, que tuvo un hijo, que el tipo murió en un accidente (creo)... Me preguntó por él. No recuerdo si en ese momento estaba o no en casa. Cualquiera hubiese sido el caso, yo le dije que estaba en el norte, que le estaba yendo bien. Cuando me preguntó por sus hijos, le dije en términos simples que ambos estaban bien, sanos, sin novedad. Cuando empezaron a hablar de ella, de que vive no sé donde (Valdivia?) quise irme. No necesitaba saber cuán feliz estaba, si es que lo estaba. Al despedirme me dijo que le diese sus saludos. Creo que nunca se los dí.

Con mi hermano nunca hablaremos de eso. Lo sé. Nunca me dará contarle de lo mío, que es bastante parecido a su anécdota. Me tomará por lesa. Por él, yo fuera monja. Ahora mismo, mismo, estoy escribiendo, tal vez con la gana de tener una hermana de 5 en mi puerta, queriéndome sacar de mi "enmimismamiento".

Pero soy el concho.

Soy el final de la familia.


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