domingo, 15 de marzo de 2015

Explorer

   

Es cierto. No siempre me parece necesario avisar para retirarme un rato. No siempre me parece necesario avisar cuánto durará… cuando volveré. A ratos solo llega la necesidad de escapar.

Hay cosas que no digo porque no creo que nadie entendería. Son cosas que se dicen en películas pero en realidad se pasan por alto. Pensamientos amargos que por ahora pienso que solo yo puedo morder.

Soy enferma de insegura. Al menos admito esa parte. Y es sola cuando creo recuperarme de ello. Algunos dicen que para estas cosas no hay más cura que ser feliz, pero eso ya es pedir demasiado. Quién en esta vida puede de corazón decirse feliz.

Divago constantemente. Juzgo a medio mundo y a veces siento de adentro que tengo plena razón. Todos estamos un poco sucios… y me obsesiona la sola idea.

No importa que tan alto me pongan para alentarme. Ni las palabras de buena crianza… en el fondo, bien en el fondo, estoy casi segura que para este mundo no soy suficiente, no sirvo, no funciono, ni brillo como las demás estrellas.

Los valores se han deformado al punto en que me veo descolocada en todas partes y con cualquiera. Me falta pensar menos, actuar más. Me falta belleza y más estupidez. O cazo o aprendo a ser cazada a la buena.

No… vez que tu tampoco me entiendes.

Hoy me quise ir porque siento que no encajo ni soy lo que necesitas. No me siento buena hija, ni la gran promesa para esta tierra que se llena de mierda. Tal vez nadie pueda conmigo. Tal vez me hunda esta noche en ríos de aguas saladas y no me salven. Ríos que solo saben llegar al mar.

O tal vez solo dormir me es suficiente, y un sueño me lleve por un instante; de este mundo al que pertenezco.

No hay comentarios:

Publicar un comentario